El microcemento, el arte de crear

13/05/2014
El Microcemento o cemento decorativo es una capa continua que consta de una base de cemento, fibras, polímeros, pigmentos y resinas, entre otros componentes. Tiene una gran adherencia sobre múltiples superficies internas y externas, tales como pisos, paredes y muebles. Su estructura mineral y la exclusiva combinación de diferentes resinas en su proceso de solicitud le da una gran resistencia a la abrasión, arañazos y a los impactos.



Sus 2-3 mm de espesor se pueden aplicar en muchos tipos de superficies como: cemento, hormigón, metal, plástico, asfalto, cerámica, mosaicos, etc..  El Microcemento permite el desarrollo de superficies continuas, ya que no necesita juntas o cortes (en grandes superficies se necesita tablas pequeñas retracción) ya que contiene aditivos que evitan la fisuración del producto por sí mismo. Todas las aplicaciones de tierra incorporan una malla de fibra de vidrio que le da más flexibilidad y resistencia a la tracción, minimizando así el riesgo de fisuras provenientes de la base. Es muy importante para el análisis y la preparación del soporte antes de la realización de microcemento. Una vez que se ha aplicado, necesita un mínimo de doce horas para secarse.



Genera superficies completamente impermeables, esto lo convierte en un material ideal para baños y cocinas. Además presenta una alta resistencia a la abrasión, a los impactos y a los arañazos, siendo especialmente adecuado para un trabajo de renovación, ya que permite transformar las superficies existentes sin necesidad de hacer trabajos alternativos.





Con el mismo material, tenemos la posibilidad de insertar logotipos, gráficos, imágenes y gráficos que deseemos incorporar en pisos y paredes, así como una amplia variedad de colores y acabados.

Es un revestimiento con un mantenimiento mínimo. Para su lavado, debe decirse que no es necesario ningún tipo de máquina para hacerlo, tenemos suficiente con un trapo en el caso de los suelos y un espray para muebles o simplemente lavar con agua y jabón neutro en el caso de las paredes.

En conclusión, el microcemento es un material noble, no tóxico, versátil y fácil de aplicar con el fin de crear espacios originales donde los límites del diseño depende sólo del arte de la creación.


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